Tener mil seguidores no significa tener mil clientes. Muchos emprendedores confunden seguidores con ventas.
Tu audiencia no compra porque:
Sé auténtico: Muestra tu realidad, no un perfil perfectamente filtrado.
Da valor primero: Tips, consejos, contenido útil. Vende después.
Interactúa: Responde mensajes, contesta comentarios, crea comunidad.
Sé directo: "Compra aquí", "Envíame un mensaje". Sin adivinar.
Un cliente comprometido vale más que 100 seguidores inactivos.
Si no venden, el problema no es Instagram. El problema es tu estrategia.
Con cariño,
Susana del Pozo